jueves, 30 de julio de 2009

Lo infraordinario, Georges Perec

Lo infraordinario, Georges Perec

Traducción de Pilar Ortiz Lovillo.

¿Aproximaciones a qué?




Me parece que lo que más nos atrae siempre es el suceso, lo insólito, lo extraordinario: escrito a ocho columnas y con grandes titulares. Los trenes sólo comienzan a existir cuando se descarrilan, y entre más muertos haya más importantes se vuelven; los aviones sólo acceden a la existencia cuando son desviados; los automóviles tienen como único destino chocar con los árboles: cincuenta y dos fines de semana por año, cincuenta y dos reportajes; entre más muertos mejor para los noticieros, lo deseable es que las cifras no dejan de aumentar. Es necesario que detrás de los acontecimientos haya un escándalo, una fisura, un peligro, como si la vida sólo pudiera rebelarse a través de lo espectacular, como si lo convincente, lo significativo, fuera siempre anormal: cataclismos naturales o revoluciones históricas, conflictos sociales o escándalos políticos...
En nuestra precipitación por mesurar lo histórico, lo significativo, lo revelador, no dejemos de lado lo esencial, lo verdaderamente intolerable, lo verdaderamente inadmisible: el escándalo no es el grisú, es el trabajo en las minas. Los “malestares sociales” no son preocupantes nada más en periodo de huelga, son intolerables veinticuatro horas sobre veinticuatro, los trescientos sesenta y cinco días al año. Los maremotos, las erupciones volcánicas, las torres que se derrumban, los incendios de los bosques, los túneles que se caen, Publicis que se quema y Aranda que habla. ¡Horrible! ¡Terrible! ¡Monstruoso! ¡Escandaloso! ¿Pero en dónde está el escándalo? ¿El verdadero escándalo? El periódico no nos dice otra cosa que: “estén tranquilos, ya saben que la vida existe, con sus altas y bajas, ya saben que siempre pasan cosas”.
Los periódicos hablan de todo menos del periodista. Los diarios me aburren, no me enseñan nada; lo que cuentan no me concierne, no me preguntan ni me responden mejor a las preguntas que me planteo o que quisiera plantearme.
Lo que vivimos es lo que pasa verdaderamente, el resto, todo el resto ¿dónde está? Lo que pasa cada día y regresa cada día, lo trivial, lo cotidiano, lo evidente, lo común, lo ordinario, lo infraordinario, la música de fondo, lo habitual ¿cómo dar cuentas de eso?, ¿cómo interrogarlo?, ¿cómo describirlo?
Para qué interrogar a lo habitual. No estamos habituados a eso. Nosotros no lo interrogamos ni nos interroga, parece no dar problemas, lo vivimos sin pensar en ello, como si no llevara consigo ni pregunta ni respuesta, como si no fuera portador de ninguna información. No es siquiera condicionamiento, es anestesia. Dormimos nuestra vida en un sueño sin sueños. ¿Pero dónde está nuestra vida? ¿Dónde está nuestro cuerpo? ¿Dónde está nuestro espacio?
Cómo hablar de esas cosas comunes, cómo acorralarlas antes, cómo apartarlas, cómo arrancarlas a lo estéril a lo cual permanecen ligadas, cómo darles un sentido, una lengua: que hablen al fin de lo que existe, de lo que somos.
Quizá se trata de construir nuestra propia antropología: la que hablará de nosotros, la que irá a buscar en nosotros lo que por tanto tiempo hemos plagiado de los otros. Ya no lo exótico sino lo endótico.
Interrogar lo que parece tan natural que ya olvidamos su origen. Quisiéramos volver a encontrar algo del asombro que sentían Julio Verne y sus lectores ante un aparato capaz de reproducir y transportar los sonidos. Porque este asombro existió, y otros más, y éstos fueron los que nos modelaron.
Debemos interrogar al ladrillo, al cemento, al vidrio, a nuestros modales en la mesa, a nuestros utensilios, a nuestras herramientas, a nuestras ocupaciones, a nuestros ritmos. Interrogar lo que ha dejado de sorprendernos. Es cierto que vivimos, es cierto que respiramos; caminamos, abrimos puertas, bajamos escaleras, nos sentamos a una mesa para comer, nos acostamos en una cama para dormir. ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿Por qué?
Describa su calle. Describa después otra. Compare.
Haga el inventario de sus bolsillos, de su bolsa. Interróguese de dónde proviene el uso y el devenir de cada uno de los objetos que saque de ellos.
Pregunte a sus cucharillas.
¿Qué hay sobre su papel tapiz?
¿Cuántos gestos hay que hacer para marcar un número telefónico? ¿Por qué?
¿Por qué no venden cigarros en las panaderías? ¿Por qué no?
Me importa poco que esas preguntas sean fragmentarias, apenas indicativas de un método o cuando mucho de un proyecto. Me importa mucho que parezcan triviales o fútiles: es precisamente eso lo que las hace más esenciales que muchas otras a través de las cuales hemos intentado inútilmente decir nuestra verdad.


Georges Perec

miércoles, 29 de julio de 2009

Imagenes del mundo flotante: cap. 1 Restaurantes







"Imagenes del mundo flotante", creo que es la traducción del termino Ukiyoe, ese estilo de grabado japones, cuyo representante más conocido es Hokusai. Las estampas de esos grabados tomaban cuenta del mundo cotidiano, de toda clase de gente en toda clase de labores. Y esa tematica fue tambien la que hizo que los impresionistas y alguien como Van Gogh, se interesaran en ellos. Algo de eso es en lo que ando actualmente. Estoy tratando de pescar esos momentos, chicos, insignificantes, cotidianos...ya sea a traves de bocetos del natural tomados en la calle, etc, como los que hay en Memorias de un Cadete; o a traves de trabajos más elaborados, como una serie de pinturas donde trato de plasmar lo infraordinario, lo de todo los días en escenas de restaurantes.






lunes, 27 de julio de 2009

Más de la reunión bloguera

Pablo el Canilla




Tito Rose


Gerardo Fernandez y Tito Rose

Reunión Bloguera

Hoy voy a publicar en simultaneo en este blog y en Memorias. Por capricho? por que esto que voy a poner es lo que suelo subir ahí, dibujos del natural, situaciones en las que participo, dibujos de gente con nombre que me interesan conservar más alla de la calidad del dibujo, por que me vuelve a traer ese momento una y otra vez. Esta reunión acaba de acontecer, esta ahicito nomás, por eso me quiero prodigar y pegar los dibujos en todos lados. Éramos unos 70 y solo alcance a dibujar a los que hablaron...quedaron muchos afuera. Tengo que entrenarme más pa dibujar más rápido y poder dibujar a todos, y muchas veces y mucho mejor. Ya lo lograre. Qué no.

Reunión Bloguera(dibujos)




Andres el viejo de Cartoneros de San Telmo



Chino de Caniches de Peron



Cristian...que trabajo en La Nacion




Daniel Mancuso



Diego de El otro campo



Diego de Mundo Perverso





Eduardo Real de Prensa canalla




El ingeniero de El blog del ingeniero



Ezequiel de Pre-textos




Gerardo Fernandez de Tirando al medio



Gladys de Mate y Sopaipilla



Guille el pizzero



J R Sentis de Tandil



Juan Carlos Bettanin.




Lucas Carrasco



Manolo de Deshonestidad Intelectual



Marcelo de Nada es casual


María Pía de Bando-neon




Mario MP




mery


Omix de Omixmoron


Papá Oso de Unidad en la Diversidad

Pedro



Sirinivasa de Datos Duros





Vita


Walter de Lomas Viejo y Lomas Nuevo

Disculpen si puse mal un nombre. Si no salieron parecidos ESO no tiene disculpas.

jueves, 23 de julio de 2009

(¿muchas preguntas para una sola entrada?):¿Quién es Enrique Mirapelos? ¿Quién es Olga Gomez? ¿Quién es Grock?












































Bueno, esto más que contestar quien es Don Nrique Mirapelos contesta la tacita pregunta de ¿qué vino a hacer Don Enrique aquí?. Las otras respuestas en las entradas siguientes.